Albuñán
por Shenai Martínez Fernández
Albuñán es un pueblo de origen medieval-andalusí que se creó a partir de una antigua alquería árabe en la que vivían familias dedicadas al cultivo de cereales.
En su museo etnográfico se guarda parte de esta tradición en forma de aperos y enseres de labranza y cada mes de junio recrean en torno a él un mercado del primer tercio del siglo XX en el que, ataviados de la época, los albuñaneros venden los productos de la tierra al ritmo de los cantes de la zona.
El nombre de Albuñán significa literalmente “el edificio”, aunque no se sabe exactamente a cuál se refiere, bien podría ser la iglesia de la Anunciación, edificación mudéjar del siglo XVI con un retablo barroco que despierta gran expectación.
Aunque tampoco hay que ignorar el ayuntamiento, cuya fachada da muestra del paso del gótico por el lugar.
La artesanía de este municipio granadino se centra exclusivamente en el hierro forjado y la madera.
A más de 1.000 metros de altitud, la gastronomía está condicionada por los cultivos de trigo y alfalfa y el ganado vacuno y lanar. El plato estrella de Albuñán es el pastel de berenjenas.
El capítulo de festejos está presidido por la fiesta de las flores, que tiene lugar el último domingo de mayo.
En estos días, las jóvenes del lugar aspiran a ser nombradas mayordomas por su belleza para organizar con sus familias las celebraciones.
Otras fechas señaladas son la fiesta del emigrante, en agosto; la de San Francisco de Asís, en octubre; y la romería de la Virgen de la Cabeza.
Albuñán se encuentra a unos 77 kilómetros de Granada, desde donde podemos llegar carretera comarcal A-44 en dirección Murcia, continuaremos por la A-92 donde tomaremos la salida 294 y atravesaremos Guadix para enlazar con la carretera GR-SE-19 y por la avenida de Granada entraremos en Albuñán.
