Lobras
por Marta Palomo Hermoso
Se trata de un municipio dotado de una personalidad propia. De pequeño tamaño, ha sabido congelar el paso del tiempo entre sus calles y sus monumentos. Además su situación regala a los visitantes paisajes tranquilos y de gran belleza natural.
Encontramos el origen de su población en los años de dominación islámica, una época de la que se conservan restos de varios aljibes y de una fortaleza mozárabe.
Tímar es un núcleo poblacional que pertenece a este municipio y que conserva también importantes huellas del pasado. Es el caso de lo que antaño fueron unas grandes minas de extracción de mercurio y varias acequias y senderos por los que podemos pasear.
De sus monumentos son destacables las iglesias parroquiales del Santo Cristo de la Ascensión y de San Agustín.
Para completar la visita a Lobras es recomendable realizar alguna de las rutas de senderismo que se ofrecen: hacia Tímar, el camino de la acequia, hasta Juviles, la Ruta de los barrancos, del mercurio o del Lobrazán y la del barranco de Timar.
Encontraremos productos realizados en cerámica, que constituyen su artesaníalocal más característica.
Esta villa es productora de aceite de oliva virgen extra, de almendras y de maíz; alimentos por tanto destacados en su gastronomía. Aunque el plato estrella en sus menús es la fritadilla, elaborada con carne de cordero o cerdo, pimientos verdes y asados, berenjenas y aceite. Otro de sus encantos culinarios son lasFlores de Calabaza, un antiguo postre que no encontraremos en otros lugares.
Celebra sus fiestas patronales en agosto aunque es destacable en su calendario el Día de Navidad; una jornada en la que se saca en procesión la imagen de Jesús.
Unos 92 kilómetros separan la capital de Granada de Lobras, municipio al que llegaremos tomando la A-44, después la A-348 y finalmente la comarcal GR-9027.
