El Valle
El Valle es un municipio de carácter rural que nos ofrece un atractivo entorno natural con enclaves tan interesantes como el Barranco de Alos, la zona del Cortijo de Budas y la Loma del Calvario. El primero nos muestra paredes calizas con zonas cavernosas excavadas por el agua, así como un algarrobo milenario. En el segundo destacan las riberas del embalse de Béznar; y en el tercero, una impresionante vista panorámica del pueblo y el Valle de Lecrín.
Su término municipal está formado por tres núcleos de población que originariamente, en tiempos de la dominación árabe, eran tahás: Saleres, Melegís y Restábal. El último es el más poblado y el que ejerce la capitalidad del municipio. Se asienta al pie del Cerro de los Canjorros, ocupando una posición intermedia entre los otros dos núcleos, que pueden contemplarse desde sus diferentes terrazas, al igual que las extensas plantaciones de naranjos y limoneros que lo rodean. Si, por el contrario, queremos obtener una de las mejores imágenes del casco urbano de Restábal, tendremos que situarnos en el puente del río Torrente. Entre su caserío blanco destaca la Iglesia de San Cristóbal, obra de estilo mudéjar del siglo XVI.
En el núcleo de población de Melegís, donde residió la Corte de Granada durante un breve período de tiempo en el siglo XIV, el nacimiento de aguas termales El Baño es especialmente atractivo para el visitante. Estas aguas tienen fama por sus propiedades curativas, sobre todo de determinadas afecciones de la piel. Entre sus abundantes casas blasonadas del siglo XVIII sobresale la Iglesia de San Juan Evangelista, declarada Monumento Nacional. Fue levantada en el siglo XVI y guarda obras de gran valor como una Virgen de la escuela de Alonso Cano, un antiguo órgano o un Cristo barroco procedente de Perú. En su estructura encontramos elementos tanto de estilo mudéjar como renacentista y barroco.
Por último, en el núcleo de Salares, el más elevado de los tres, lo más interesante es la histórica Fuente de los Siete Años, situada en el Pago de los Llanos. Se llama así porque su manantial daba abundante agua durante siete años y menguaba su caudal durante otros siete. También llamará la atención del viajero su Iglesia de Santiago, del siglo XVI. Destaca su portada de Pedro de Berrueco, su artesonado y su torre rematada con azulejos.
Para degustar los manjares más tradicionales de la gastronomía de El Valle tendremos que pedir platos como el puchero de hinojos, pisto de calabaza, ensalada de pimientos coloraos, caracoles en salsa, manos de cerdo, y albóndigas de bacalao. De postre, leche frita, crema de naranja, torrijas y pastas de almendra.
De su calendario festivo destaca la Fiesta de San Antón, que se celebra en el mes de junio en el núcleo de Melegís. Además de los eventos de carácter religioso, por la noche tiene lugar una animada verbena.
El Valle se encuentra a unos 39 kilómetros de la ciudad de Granada, desde la que se puede llegar a través de la carretera A-44, dirección Armilla-Motril. Tendremos que tomar la salida 160 de Lecrín-El Valle, para enlazar primero con la GR-SO-24 y segundo con la GR-110, que nos lleva al centro de su núcleo principal de población: Restábal.