Gines
por Paz Rosado
Gines, que ya estuvo habitada por los romanos y los árabes, surgió tal y como hoy la conocemos en torno a una serie de haciendas dedicadas a la transformación de productos agrícolas. A partir de haciendas como la del Marqués de Torrenueva o la del Santo Ángel, nació y se fue desarrollando su núcleo de población.
En su actual casco urbano, los edificios más sobresalientes por su valor histórico y artístico son: la Iglesia de la Virgen de Belén y la Ermita de Santa Rosalía. La iglesia, situada en la Plaza de España, fue construida entre los siglos XVI y XVII, muestra elementos de estilo mudéjar tardío y guarda en su interior un bello lienzo que representa el Entierro de Santa Catalina y que está atribuido a Zurbarán. La Ermita se encuentra en la plaza que le da nombre y está fechada en el siglo XVIII.
El viajero que quiera degustar los manjares más típicos de la gastronomía de los ginenses o abgenenses, deberán probar sus aceitunas aliñadas, los guisos de patatas, carne a la brasa, bacalao con tomate, potaje de garbanzo, gazpacho y dulces como los pestiños, las torrijas o las mantas.
Y para aquellos que quieran vivir el carácter festivo de los habitantes de Gines, deben acudir al pueblo a principios de julio, que es cuando se celebra la Feria; en septiembre, para la Romería de San Ginés; en octubre, para la Procesión de Nuestra Señora del Rosario y Santa Rosalía, que termina con la suelta de un toro de fuego; y en febrero, que es cuando tienen lugar sus Carnavales. Otras fiestas importantes de Gines son el Corpus Christi, en junio; la Semana Santa y la salida de las carretas hacia la Romería del Rocío, en mayo.
El municipio de Gines se encuentra a unos 10 kilómetros de la ciudad de Sevilla, desde la que se puede llegar a través de la autovía A-49, en dirección Huelva. Hay que tomar la salida hacia Castilleja de la Cuesta, para enlazar con la N-431.
