Comarca de la Axarquía- Almáchar

Almáchar

por Paz Rosado

Entre viñedos, olivares, cereales y pequeños huertos que se extienden por las riberas de los ríos que bañan su término municipal, destacan en Almáchar las casas de labor con sus típicos paseros en los que las uvas se convierten en pasas. Y es que estamos ante otro de los pueblos que conforman la Ruta de la Pasa.

Como muchos otros municipios del interior de la comarca de la Axarquía, su entramado urbano es el típico de origen árabe: calles estrechas, empinadas y sinuosas, de casas bajas y encaladas, donde el coche no tiene cabida. En este laberinto sobresale la calle de los Mártires, que rodea el edificio más emblemático del municipio: la Parroquia de San Mateo. El templo, que se encuentra en el centro del pueblo, es obra del siglo XVI, edificado siguiendo las pautas de los estilos arquitectónicos gótico tardío y renacentista. En el exterior de la iglesia, resalta la torre cuadrada de estilo mudéjar.

Otros lugares interesantes son: la plaza del pueblo, ya que desde ella y en dirección al municipio de El Borge, se obtiene una bella y amplia vista panorámica; la Cueva del Toro, que se encuentra a las afueras del pueblo y constituye un lugar de interés desde el punto de vista arqueológico; el Museo de la Pasa; y la fuente en la que, según cuenta la leyenda, los morisco enterraron sus tesoros antes de ser expulsados de estas tierras.

Desde el punto de vista de la gastronomía, los almachareños son especialistas en la elaboración del famoso ajoblanco. No en vano, desde 1967, celebran una fiesta de exaltación de este rico manjar malagueño. Pero no sólo de ajoblanco viven en Almáchar. Otras recetas típicas de esta tierra son las berzas de coles, el puchero, el gazpacho y las sopas amarillas. Y todo ello, regado con el delicioso vino moscatel de producción artesanal propia.

El calendario nos brinda diversas oportunidades para vivir el carácter festivo más tradicional de los almachareños. La llamada Función del Santo Cristo de la Banda Verde, que tiene lugar en el mes de mayo, viene celebrándose desde el año 1754, y no sólo se trata de una fiesta religiosa, también se llevan a cabo actuaciones musicales, bailes, fuegos artificiales y torneos deportivos. También en el mes de mayo tiene lugar la tradicional Romería de San Isidro; en julio, se celebra la Fiesta de Nuestra Señora del Amparo, patrona de Almáchar; y en septiembre, además de la Fiesta de las Candelas, la Fiesta del Ajoblanco. Esta última fiesta, que ha sido declarada de Interés Turístico Nacional, atrae cada año a un mayor número de visitantes dispuestos a degustar este sabroso plato y a disfrutar de todas las actividades culturales y festivas que completan esta fiesta.

Además de tierra de paseros, Almáchar es tierra de leyendas. Una de ellas es la ya aludida, que cuenta que en una cueva que existe bajo una de las fuentes del pueblo próximas al río Almáchar, los moriscos enterraron un importante tesoro antes de ser expulsados tras la reconquista cristiana. Otra, más arraigada, es la que narra cómo el Cristo de la Banda Verde o de la Misericordia salvó a unos marineros que habían naufragado frente a las costas de Málaga, debido a un fuerte temporal.

Almáchar se encuentra a 24 kilómetros de Vélez-Málaga y a 26 de la ciudad de Málaga.