Rafael Alberti nació en la localidad gaditana de El Puerto de Santa María el 16 de diciembre de 1902. Pintor antes que poeta, Alberti descubre esta vocación cuando, ya viviendo en Madrid, entra por primera vez en el Museo del Prado. No obstante, antes ya había dedicado parte de su tiempo a pintar los barcos y trasatlánticos que llegaban a su tierra natal. El refugio en la poesía lo busca cuando muere su padre y empieza a sentir la nostalgia de la bahía de Cádiz.
La pintura queda relegada a un segundo plano y empieza a introducirse en la Residencia de Estudiantes, donde se relaciona con los padres de lo que luego se conocería como la Generación del 27: Dámaso Alonso, Lorca, Gerardo Diego, Aleixandre,…
Sus primeros poemas fueron escritos entre 1920 y 1924, bajo el título Mar y Tierra, que más tarde quedarían recogidos en el libro titulado Marinero en Tierra, tras ganar el Premio Nacional de Literatura de 1924-1925. Otras de sus obras maestras, Sobre los ángeles, fue publicada en 1929.
Además del Nacional de Literatura, también obtuvo otros premios como el Lenin de la Paz, el Nacional de Teatro y el Cervantes de Literatura.
Un año después de casarse con la escritora María Teresa León, estrena su primera obra de teatro, El hombre deshabitado, y comienza a relacionarse en Francia con Picasso y escritores sudamericanos como César Vallejo o Alejo Carpentier. Empiezan los años de su exilio y ya no regresará a España hasta el año 1977.
Desde entonces y hasta su muerte, residió en su ciudad natal con su segunda esposa, María Asunción Mateo. Y allí, en El Puerto de Santa María, la Diputación de Cádiz ha creado una fundación que lleva su nombre y en la que está gran parte de su archivo y biblioteca personal.