La recogida de la naranja |
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La buena cocina está íntimamente ligada a la geografía de cada localidad, por eso en Arcos la influencia serrana y la cercanía del mar convierten su cocina en la mezcla perfecta de platos típicos de una comarca interior serrana y el sabor del mar.
Son muy comunes los productos de la tierra, dada la cercanía del cauce fluvial, es la denominada “cocina de la huerta” con platos que combinan verduras y legumbres para la elaboración de potajes tan característicos como el potaje de acelgas, o la Alboronía, realizado a base de calabaza, garbanzos y tomates; así como el “guiso mediterráneo, hecho con arroz caldoso, carne o pescado y especias aromáticas.
Productos como las naranjas, tagarninas, espárragos o caracoles forman parte de la gastronomía local más característica de esta villa.
Para acompañar cada una de estas comidas qué mejor que un buen vino, tinto o blanco, de los que se elaboran en la propia localidad.
Y de postre destaca la repostería con dulces elaborados de forma artesanal.
Para poder disfrutar de todos estos platos recomendamos acudir a los bares y restaurantes más conocidos de Arcos. Es el caso del Cortijo Faín, en la carretera de Arcos a Algar en el kilómetro 3; el Mesón del Corregidor y de la Molinera, con menús de entre 10 y 30 euros; el restaurante El Lago, El Retiro o Mesón la Fonda. Todos ellos con cocina casera.
Pero la oferta gastronómica continúa con los siguientes restaurantes: Revertito, El Voy-voy, El Faisán, El Terraza, Asador El Tropical, Mesón la Plata, Los Murales, Cortijo Mesa de la Plata, San Marcos; así como las siguientes ventas: Junta de los Ríos, Merchán, La Coruña, Pajuelo, Antonio y El Pavo.
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