Alcolea
por Paz Rosado
Junto al río Alcolea y sobre una loma de la Sierra de Gádor se encuentra este municipio de la Alpujarra almeriense. Su nombre nos da una pista sobre sus orígenes, ya que proviene del árabe y significa pequeño castillo o castillejo. Tras la construcción del Pantano de Beninar, a sus tierras se unieron los términos municipales de Darrical y Lucainena. Este hecho le ha permitido ampliar su atractivo tanto para los devotos del turismo rural como para los que prefieren destinos en los que poder contemplar edificios de interés histórico y artístico.
Entre los restos arqueológicos que se encuentran en Alcolea destacan los de dos fortificaciones de época árabe, una situada en el paraje conocido como El Castillejo y otra llamada La Torrecilla, en lo que era Darrical.
En el recorrido por el casco urbano de este municipio, destacan entre sus construcciones cúbicas con aleros de pizarra, varios edificios de carácter religioso: la Iglesia Parroquial de Santa Rosa de Viterbo, en la que destaca su alta torre que domina todo el caserío; la Ermita de San Sebastián y San Ildefonso, fechada en el siglo XVIII y localizada en el camino viejo de Ugijar; y la Iglesia del Santo Ángel Custidio, en lo que era el término de Darrical.
También son de interés los diferentes miradores que existen en Alcolea: el de la ermita, el del Cerro de la Cruz y el de la Era de la Ermita, que brindan al viajero las mejores vistas de la zona.
Los aficionados al turismo rural, y sobre todo los que disfrutan practicando deportes al aire libre como el senderismo podrán elegir entre las diferentes rutas que existen en Alcolea y sus alrededores y no deben perderse el Área Recreativa de las Hortichuelas, situada junto al río de igual nombre que el municipio. Para obtener una amplia panorámica de la Alpujarra, Sierra Nevada y la Sierra de Gádor, se puede subir al Peñón de Baños, a 900 metros de altitud. Otra de las rutas interesantes es la llamada de Darrical, que se extiende a lo largo de 15 kilómetros, hasta el pantano de Beninar. También merece destacar la ruta de la subida a las Eras del Cortijuelo y al Empalme de las Balsitas.
El viajero interesado en la artesanía típica de Alcolea, se encontrará con trabajos en esparto.
Los que quieran degustar los manjares tradicionales de su gastronomíatendrán que probar el aceite de oliva que se produce en sus almazaras, así como platos elaborados con lo que muchos llaman “oro líquido”. Entre ellos destacan el choto al ajillo, el ascoscús, las migas y las gachas. De su repostería son famosas las hojuelas.
Por último, los que deseen conocer y vivir las fiestas más populares de Alcolea, deben acudir a principios de septiembre, para la Feria en honor a su patrona, Santa Rosa de Viterbo; el 20 de enero para San Sebastián, su patrón; y en Carnavales para el Entierro de la Zorra.
El municipio de Alcolea se encuentra a unos 80 kilómetros de la ciudad de Almería, desde la que se puede llegar tomando la salida 391 de la A-7 en dirección Berja. Una vez que atravesamos este municipio, hay que seguir por la A-347 y luego la A-348 que nos lleva directamente a nuestro destino.