La provincia de Almería destaca por la conservación de buena parte de sus alfares históricos y de las colecciones más tradicionales para fuego y agua. La localidad de Níjar ha sido uno de los grandes centro alfareros andaluces y se caracteriza por sus cántaros con vidriado multicolor y chorreado sobre la superficie de lebrillos, fuentes, fruteros, cántaros y otras piezas. Y en el municipio de Albox, se encuentra el alfar de Los Puntas, declarado Patrimonio Histórico Artístico por su antigüedad, por el mantenimiento de sus instalaciones y por la continuidad del proceso completo de la alfarería tradicional.
Aunque los trabajos en mármol de Macael, el que se extrae de la Sierra de Los Filabres, están muy industrializados, existen talleres que elaboran de manera artesanal muchos objetos de decoración con esta materia prima.
También en el municipio de Níjar encontraremos uno de los productos artesanales almerienses con más fama: las jarapas; y en Mojácar, además de en otros pueblos de la provincia, collares, pendientes, camafeos y otras joyas elaboradas con el coral rojo que se extrae de las proximidades de la Isla de Alborán.