El Castillo de las Guardas
por Paz Rosado
El municipio sevillano de El Castillo de las Guardas encierra numerosos atractivos de diferente índole. Quizá el más conocido sea el relativo a su oferta para el turismo rural, pero recorriendo sus calles y entorno también descubrirá el viajero enclaves de interés histórico y artístico, además de magníficos lugares para la práctica de deportes como el piragüismo, la escalada o la caza mayor.
Aquellos que quieran disfrutar de todo cuanto ofrece este municipio, deberán recorrerlo de cabo a rabo y, para ello, también tendrán que visitar las diferentes aldeas que forman parte de su término. Entre ellas se encuentran El Cañuelo, Valdeflores, La Alcornocosa, Archidona y Arroyo de la Plata.
Uno de los lugares más interesantes de este pueblo es la Reserva Natural El Castillo de las Guardas, que se encuentra a tan sólo 5 kilómetros de su núcleo principal de población, en los terrenos de lo que fue una antigua explotación minera. Aquí se pueden contemplar numerosas especies animales como leones, tigres, elefantes y osos panda, entre otros. Además, está dotada conalojamientos rurales y ofrece la posibilidad de llevar a cabo numerosas actividades al aire libre; deportes como el piragüismo, el tiro con arco, la escalada o rutas 4x4.
De su entorno natural, los enclaves más interesantes desde el punto de vista paisajístico son: la ribera del río Guadiamar y la dehesa donde habita el toro de lidia entre encinas, alcornoques y plantas aromáticas. La mejor manera para disfrutar de todo su encanto es recorriendo algunas de los sendero señalizados que existen en el termino de El Castillo de las Guardas. Entre ellos están la Ruta de la Ribera del Guadiamar, la de Los Callejones y los caminos como el de Las Cañadillas o el del Embalse de la Minilla.
Los que quieran conocer el patrimonio histórico y artístico de este pueblo, tendrá que acudir a sus yacimientos arqueológicos, entre los que se encuentran restos megalíticos como el dolmen de la Sepultura del Moro o Lapa del Moro, localizado en la finca municipal cerca de la carretera que une el núcleo principal de población con su aldea de Las Cañaillas. También se encuentran restos dolménicos en el Cerro de San Antonio Abad y en la Dehesa de Abajo.
También forman parte de su patrimonio arquitectónico los restos de su antiguo castillo, situado en la parte más alta de su principal núcleo urbano; la Iglesia Parroquial de San Juan Bautista, que fue levantada sobre los restos de una antigua mezquita y cementerio árabe entre los siglos XIII y XIV; la Plaza de Toros, realizada en piedra en el siglo XIX; y la Fuente Abrevadero, antiguo punto de reunión de los vecinos de El Castillo de las Guardas.
En el capítulo de artesanía, destacan los trabajos realizados en corcho, hojas de palma y asta de toro. También encontramos trabajos artesanales de bordado y pintado de mantones.
De su gastronomía, los manjares más sabrosos y típicos son aquellos elaborados con carne de caza y cerdo ibérico, como la caldereta de jabalí o venado, la olla de matanza o la gandinga. Además, son muy apreciados sus productos derivados del cerdo ibérico y sus quesos de cabra.
Desde el punto de vista festivo, las fechas señaladas en el calendario de El Castillo de las Guardas son: la Semana Santa, son su Vía Crucis y la procesión del Viernes Santo; el mes de junio, con la fiesta del Día del Corpus y laRomería en honor a San Juan Bautista; y agosto, que es cuando tiene lugar laFeria del pueblo. Además, durante los meses de mayo, julio y agosto, sus diferentes aldeas celebran sus fiestas.
El municipio de El Castillo de las Guardas se encuentra a unos 50 kilómetros de la ciudad de Sevilla, desde la que se puede llegar tomando la N-630, para luego enlazar con la N-433, primero, y después con la A-476 y con SE-530.