Comarca Alpujarra Almeriense

Alpujarra Almeriense

Esta comarca almeriense ofrece 24 pequeños pueblos que, al amparo de Sierra Nevada y bañados por el río Andarax, se encuentran repartidos en un hermoso y fértil valle. En sus tierras, formando bancales y regadas mediante el sistema de acequias de tiempos de los árabes, se cultivan diferentes árboles frutales, así como vides y olivos.

La mayoría de estos municipios tienen su origen en la época de la dominación musulmana, aunque también en algunos se han encontrado vestigios de la civilización romana, además de restos pertenecientes a la prehistoria. En su conjunto, constituye un destino ideal para los aficionados al turismo rural.

Además de enclaves naturales de gran belleza como el Desfiladero del río Nacimiento, el viajero disfrutará de la arquitectura popular y típica de la Alpujarra y de edificios cargados de historia como el palacio de Fuente Victoria, pedanía del municipio de Fondón, donde el último rey de Al-andalus, Boabdil, se refugió cuando perdió su reino antes los cristianos.

Alboloduy

Es uno de los municipios almerienses que forman parte del Parque Natural de Sierra Nevada. El desfiladero del río Nacimiento, en cuya margen derecha se sitúa el pueblo, la Rambla de los Yesos y el Barranco de los Catalanes son algunos de los enclaves más interesantes de su atractivo entorno natural. Más info >

Alcolea

Los aficionados al senderismo podrán elegir entre rutas como la de Darrical, la subida al Peñón de Baños o la bajada del río Alcolea. A orillas de este río se encuentra el municipio rodeado de olivos centenarios. No es extraño, por tanto, que en sus almazaras se produzca uno de los aceite de oliva más buenos de la provincia. Más info >

Alhabia

A las tierras de este pueblo, que fue una antigua alquería musulmana, van a parar las aguas del río Nacimiento y la del Andarax, convirtiéndolas, así, en una espléndida y fértil vega. Entre el caserío de su casco urbano destacan la iglesia barroca de San Juan Evangelista, su antigua farmacia, y más. Más info >

Alhama de Almería

Uno de los atractivos más destacados de este municipio es su Balneario de San Nicolás de aguas termales abierto todo el año. Su pasado árabe queda reflejado en su casco urbano de calles estrechas y empinadas, así como en los restos de su fortaleza nazarí en el Cerro de la Cruz y del morabito musulmán en la Cruz de Arriba. Más info >

Alicún

Es otro de los pequeños pueblos almerienses en los queda patente su origen musulmán. Se encuentra su casco urbano rodeado de huertas escalonadas y por eso muchos la consideran un vergel. Entre sus calles y caserío, un lugar destacado es la Balsa del Minarete, también llamada Fuente de Alicún. Más info >

Almócita

Su casco urbano es el típico de calles estrechas y serpenteantes, enmarcadas por casas blancas y donde destaca la iglesia. En este caso el templo está dedicado a Nuestra Señora de la Misericordia, y conserva un bello artesonado mudéjar en su capilla mayor. Interesante también es su lavadero público situado en la Plaza de la Libertad. Más info >

Alsodux

Este municipio, que se encuentra a 21 kilómetros de la ciudad de Almería, ofrece al visitante la típica estampa de los pueblos alpujarreños que se dedican básicamente a la agricultura. En el conjunto de su caserío blanco, destaca al primer golpe de vista su iglesia con fachada color ocre. Más allá de su diferente color, el interés del templo se encuentra en su valor arquitectónico. Más info >

Bayarcal

Situado a más de 1.000 metros de altitud, este pueblo es el más alto de la provincia de Almería y sus vecinos presumen de contar en él con el aire más puro de Europa. De lo que fue su castillo construido en el siglo XVI hoy sólo quedan algunos vestigios. De su iglesia, de la misma época, destaca su torre decorada con azulejos mudéjares. Más info >

Beires

Las tierras de este municipio almeriense forman parte del Parque Natural Sierra Nevada y ofrecen un magnífico enclave para disfrutar al aire libre: la Fuente del Nacimiento. Su típico casco urbano se encuentra dividido en dos barrios separados por el Barranco del Nacimiento. Más info >

Bentarique

En este pueblo almeriense, dónde se siguen utilizando las acequias y canales abiertos por los musulmanes, se encontró un bello tesoro de orfebrería musulmana que hoy se conserva en el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid. Es otro de los destinos ideales para los aficionados al llamado turismo rural. Más info >

Berja

La Torre de los Enciso, el Templo de la Anunciación, la Plaza del Mercado, la Ermita de Nuestra Señora de Gádor, la de San Tesifón, el Molino del Perrillo, los Baños Árabes y los restos de lo que fue su Alcazaba son alguna de las joyas que conforman el patrimonio histórico y artístico de Berja. Más info >

Canjáyar

Este pueblo almeriense se encuentra al pie de Sierra Nevada y mirando a la Sierra de Gádor. Rodeado de huertas, que se siguen regando mediante un sistema de acequias centenarias, ofrece un entrono espacialmente agradable para todos los sentidos. No es extraño que sus tierras ya fueran habitadas en tiempos prehistóricos. Más info >

Dalías

Según los restos encontrados en su término municipal, sus tierras ya fueron lugar de asentamiento humano en la Edad del Bronce. En el recorrido por este pueblo de la Alpujarra almeriense hay que hacer una parada especial en la Ermita de Celín, en los Baños de la Reina y en la Iglesia Parroquial de San Miguel. Más info >

Fondón

Fue en un palacio que aún se conserva en su pedanía de Fuente Victoria donde Boabdil, el último rey de Al-Andalus, se refugió cuando perdió su reino ante los cristianos. Otras construcciones destacadas de su patrimonio histórico y artístico son la Fuente de Carlos IV, su iglesia parroquial y su ermita de estilo mudéjar. Más info >

Huécija

Entre su caserío blanco de tejados planos, estilo arquitectónico típico de la Alpujarra, destaca el Convento de los Agustinos con su bella torre. Otros edificios interesantes que encontrará el viajero que recorra sus calles son: el templo parroquial de la Anunciación y la Ermita de la Santa Cruz. Más info >

Íllar

Es éste otro de los municipios de la Alpujarra almeriense dedicado tradicionalmente a la agricultura. En otros tiempos, fue un gran productor de uva de mesa, pero ahora tienen más fuerza los cultivos de cítricos. En su casco urbano destacan edificios como la Iglesia de Santa Ana, el lavadero y la Fuente de Íllar. Más info >

Institución

Esta antigua alquería árabe se encuentra ubicada en el margen izquierdo del río Andarax, en el tramo medio del curso fluvial. En el recorrido por sus calles llaman la atención sus casas señoriales decimonónicas, el edificio de su Ayuntamiento, su iglesia mudéjar y ermitas como la de San Cosme y San Damián. Más info >

Laujar de Andarax

Cuando el rey Boabdil se rindió ante los cristianos, los Reyes Católicos le cedieron este municipio como lugar de residencia. Entre su patrimonio histórico y artístico destaca la Iglesia de la Encarnación, con su torre mudéjar. En su interior conserva un bello retablo barroco y lienzos del pintor Alonso Cano. Más info >

Ohanes

Este municipio, que presume de ser el primero ecológico de España, es muy conocido por su producción de uvas de la variedad de su mismo nombre. Su típico entramado urbano de casas blancas rodeadas de bancales donde se cultiva la vid convierte a Ohanes en un lugar ideal para aquellos que optan por practicar el llamado turismo rural. Más info >

Padules

Además de su entorno natural, donde destaca el maravilloso enclave denominado Las Canales, en Padules hay que visitar su Iglesia Parroquial de Santa María la Mayor. En su interior, llama la atención sus originales sillones hechos con troncos de castaño y la pila bautismal construida con una piedra de molino. No hay que marcharse del pueblo sin degustar su vino clarete elaborado de forma artesanal. Más info >

Paterna del Río

En su casco urbano destaca la Iglesia de San Juan Evangelista, fechada en el XVI y con un bello retablo barroco de la primera mitad del XVIII. El Área Recreativa de Fuente Agria y el poblado de Guarros haciendo así alusión a sus aguas termales especialmente beneficiosas para las afecciones de la piel. Más info >

Rágol

Rodeado de grandes eucaliptos, este pueblo de la Alpujarra almeriense se encuentra situado en la ribera del río Andarax, y es especialmente conocido por sus uvas y pasas. Entre su caserío blanco repartido por calles estrechas y empinadas, destaca su iglesia parroquial de estilo mudéjar dedicada a San Miguel. Más info >

Santa Cruz de Marchena

Nos encontramos ante otro de los típicos pueblos blancos coronados por una iglesia de estilo mudéjar y rodeado de cultivos de naranjos y vides. Su llamada Plaza Ducal y sus aledaños ofrecen al viajero lo más interesante del patrimonio histórico y artístico de este municipio de la Alpujarra almeriense. Más info >

Terque

En el recorrido por las calles de este pequeño municipio, llamará la atención del viajero algunas casas de los burgueses que surgieron de la explotación minera de la Sierra de Gádor y de la exportación de su uva de mesa. En el interior de su iglesia, de estilo mudéjar, destaca un retablo churrigueresco y la capilla barroca dedicada a la Virgen del Rosario, patrona del pueblo. Más info >