Comarca de Río Nacimiento

Río Nacimiento

Cinco municipios componen esta comarca almeriense, entre los que se encuentra el que le da nombre, el pueblo de Nacimiento.

Al ser tierras del interior, se presenta como un enclave especialmente indicado para aquellos viajeros amantes de la naturaleza y de lo típicamente rural. Pero además de bellos paisajes, el visitante se verá sorprendido por joyas del patrimonio histórico andaluz como es la mezquita del siglo XIII en el municipio de Fiñana. Declarado Monumento Histórico-Artístico, hoy es templo cristiano dedicado a Nuestro Padre Jesús.

Abla

Además de contemplar su iglesia parroquial del siglo XVI, su ermita de los Santos Mártires o el mausoleo romano del siglo II, en Abla se pueden hacer estupendas excursiones y adquirir numerosos y bonitos trabajos de artesanía, como las típicas jarapas y los tradicionales objetos elaborados con esparto. Más info >

Abrucena

Es otro de los pueblos de sierra de la provincia de Almería, que ofrece a sus visitantes maravillosos enclaves naturales. En el conjunto de su caserío blanco, donde las calles son estrechas y serpenteantes, destaca su iglesia del siglo XVI. También merece una visita las ruinas del Castillejo, situado en el cauce alto del río, en un montículo que hay frente al pueblo. Más info >

Fiñana

Situado a los pies de Sierra Nevada, Fiñana es el típico municipio en el que su pasado árabe aún está presente. La muestra más clara de ello es su antigua mezquita del siglo XIII, que hoy es la Ermita de Nuestro Padre Jesús, y que está declarada Monumento Histórico. Su antigua Alcazaba es otro recuerdo vivo de su pasado. Más info >

Las Tres Villas

Este pueblo almeriense es fruto de la fusión voluntaria de tres municipios: Doña María- Ocaña y Escúllar. En su conjunto, se presenta como un enclave ideal para los amantes de la naturaleza y de lo típicamente rural. Llamará la atención del viajero sus casas construidas en piedra a la vista, con tejados de pizarra. Más info >

Nacimiento

Este pueblo, que se encuentra atravesado por el río del mismo nombre, vivió su época de mayor esplendor en el siglo XIX y principios del XX, cuando era importantísima su producción de uva de mesa y cuando surgieron sus numerosos cortijos. Entre su caserío destaca la iglesia de San Miguel, de estilo mudéjar y levantada en el siglo XVIII. Más info >