Alcalá la Real
por Paz Rosado
Alcalá la Real es un destino de especial interés para aquellos viajeros que pretenden practicar el llamado turismo cultural. No en vano, este bello municipio forma parte de dos de las rutas culturales más atractivas de cuantas se pueden realizar en Andalucía: la Ruta del Califato del Legado Andalusí y de la Ruta de los Castillos por tierras andaluzas.
El núcleo urbano principal del término municipal de Alcalá la Real se extiende a los pies de su famoso Castillo de la Mota y de sus murallas circundantes, conjunto catalogado como Monumento Nacional. Esta fortaleza, de origen nazarí, conserva tres torres: la del Homenaje, que sirve de acceso a la alcazaba; la de la Vela o Campana, situada en la zona más alta; y la Mocha. En el interior de la Mota se encuentra la Iglesia Abacial de Santa María la Mayor, que fue levantada entre los siglo XVI Y XVII donde antes existía una mezquita, y en cuyo conjunto destaca su torre de 42 metros de altura. Este magnífico templo presenta elementos arquitectónicos de estilo gótico, plateresco y renacentista.
También forman parte del patrimonio histórico y artístico de Alcalá la Real otros edificios de carácter religioso como la Iglesia de Santo Domingo de Silos, la más antigua del municipio; la Iglesia de San Juan, que fue construida sobre una antigua medieval; la Iglesia de la Consolación, de estilo renacentista; y laIglesia y Convento de la Encarnación, también renacentista.
Entre los edificios interesantes de carácter civil están el Palacio Abacial, de estilo barroco; y el Ayuntamiento.
Los visitantes que también deseen disfrutar del entorno natural de Alcalá la Real, deben acudir a enclaves como la Hoya de Charilla, lugar frecuentemente visitado por los buscadores de setas, que se encuentra en la Sierra de La Martina; Peñas de Majalcorón, de singular paisaje kárstico; Riberas del Río Velillos, con bella cascada de agua; y Los Tajos de San Marcos, a los que se pueden llegar tras recorrer dos kilómetros en coche o practicando senderismo.
Los aficionados a la artesanía hallarán en Alcalá la Real numerosos artículos elaborados con diferentes materias primas. Objetos de cerámica, de albardonería y talabartería, jarapas y tapices, así como vidrieras emplomadas.
Para saborear los manjares tradicionales de la gastronomía de los alcalaínos, hay que probar platos como el jarrete con zanahorias, el pollo a la secretaria, las sopas cachorreñas, el lomo de orza en aceite de oliva, así como sus embutidos derivados del cerdo. Los más golosos deben pedir dulces como los roscos de San Antón o los de vino, los higos de las monjas y las tortas de aceites rellenas con nueces y pasas. Todas estas viandas se pueden regar con el vino de la tierra que se produce de forma artesanal.
Los que pretendan vivir las fiestas populares de Alcalá la Real pueden acudir a este municipio para su Semana Santa, fiesta declarada de Interés Turístico Andaluz; en agosto, mes en el que se suceden numerosas fiestas como las patronales en honor de Nuestra Señora de las Mercedes y a San Roque, las Fiestas de la Virgen de la Coronada y las Fiestas patronales en honor a San Jerónimo; en junio, para las Ferias y Fiestas de San Antonio, cuando, al igual que en las celebraciones de agosto, se llevan a cabo animadas verbenas nocturnas, actuaciones musicales y otras actividades lúdicas; y en septiembre, para las Ferias y fiestas en honor de San Mateo.
El viajero podrá disfrutar con calma y tiempo del patrimonio natural, histórico y artístico de este municipio, gracias a los diferentes tipos de alojamientosturísticos que en él encontrará.
El municipio de Alcalá la Real se encuentra a unos 70 kilómetros de la ciudad deJaén, desde la que se puede llegar tomando la A-316, para luego enlazar con la N-432, primero, y después con la A-339, que es la que nos conduce directamente a nuestro destino.