El Parador de Ronda ofrece una interesante mezcla de antigua y nueva arquitectura, con vistas a la concurrida y pintoresca plaza de España, por un lado, y al impresionante tajo, por el otro, así como al Puente Nuevo, construido en el siglo XVIII y situado justo al lado del edificio. Es un excelente punto de partida para explorar Ronda.
Solo por tomar algo en la terraza merece la pena viajar desde lejos hasta el Parador de Ronda; después de una tapa y algo de beber, estará preparado para visitar la ciudad. El restaurante es famoso por su excelente cocina y ofrece platos locales y regionales, como es típico en los Paradores.
Se trata de otro Parador histórico, alojado en lo que hace tiempo fue el ayuntamiento de Ronda. A pesar de que el edificio tiene su historia, han optado por decorarlo con un diseño moderno. A quienes lo visiten en verano les recomendamos un chapuzón en la piscina, situada al filo del tajo.
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Parador de Ronda
Este edificio fue sede en el pasado del ayuntamiento de Ronda. Las vistas son impresionantes y se encuentra a escasos metros del emblemático puente situado sobre el tajo que divide el municipio en dos.