Por fin el flamenco recibe el reconocimiento de la UNESCO con la concesión del título de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad. Decimos por fin porque ya en el año 2005 se solicitó este título para el flamenco y entonces la UNESCO lo rechazó.
Los esfuerzos de la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía, promotora de la candidatura del flamenco para ser reconocido Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, han dado sus frutos. Para ello, ha contado con la colaboración de los gobiernos autonómicos de Extremadura y Murcia, que respaldaban esta candidatura; así como con el apoyo de más de dos millones de andaluces, a través de las mociones aprobadas en los ayuntamientos de numerosos pueblos y ciudades de la Comunidad Autónoma Andaluza. También se sumaron a esta propuesta de elevar el flamenco a la categoría de Patrimonio de la Humanidad colectivos de artistas, instituciones muy diversas y personas de más de sesenta países que manifestaron su apoyo a la candidatura a través de Internet.
Los argumentos presentados por la Consejería de Cultura de la Junta de Andalucía para que el flamenco logará el título de Patrimonio de la Humanidad: el flamenco es la más significativa y representativa manifestación del patrimonio cultural inmanente del sur de España, que representa una aportación única de la cultura española en el mundo, y que dota de identidad a comunidades, grupos y personas; aporta ritos y ceremonias de la vida social y privada; y crea un vocabulario y corpus de expresiones.
“El flamenco, siendo una música del pueblo y para el pueblo, es mundial, no localista, y se le debía el respeto que ahora le ha reconocido la Unesco”: José Mercé, cantaor.